Al principio del último año escolar viajamos con nuestra profesora de religión Prof. Kreiner-Haidwagner y nuestro profesor de español Prof. Gunacker a España. Fue la última vez que los chicos de la “Europaklasse” pasaban tiempo en un país extranjero para perfeccionar sus conocimientos de una lengua.
Nuestro viaje comenzó en el aeropuerto de Graz. Volamos vía Frankfurt a Madrid. La primera semana la pasamos en Salamanca. Esta pequeña y bonita ciudad es el hogar de unos 50,000 estudiantes de dos universidades y durante una semana fue un hogar agradable para nosotros. Vivíamos en casa de familias anfitrionas muy hospitalarias en pequeños grupos de dos a tres chicos. Íbamos al colegio de lunes a viernes cuatro horas al día. Nuestros profesores de español eran muy competentes y aprendimos mucho con ellos. Además la escuela organizó otras actividades: En los dos primeros días visitamos las ciudades de Segovia y Alberca con nuestra guía Carmen, una mujer ya mayor con mucha experiencia. Fue muy interesante porque pudimos ver la vieja cultura española en La Alberca y la influencia romana en Segovia, allí vimos el imponente acueducto.
Además fuimos guiados por la ciudad por una profesora de la escuela, de esta manera aprendimos mucho sobre la historia de Salamanca. El segundo fin de semana lo pasamos en la capital de España, Madrid. No tuvimos mucho tiempo allí (en Madrid), pero vimos una gran parte de la ciudad. En el camino a Madrid, el palacio de El Escorial, el edificio renacentista más grande del mundo con historia austríaca.
Fue un viaje inolvidable y nos divertimos mucho. Mejoramos nuestro español, conocimos una nueva cultura y disfrutamos de la cocina española. Se podría decir que fue el “viaje final” perfecto.
Clemens Müllegger, 8E